Información de producto
Desde 1906, LALLIER es un prestigioso elaborador de grandes vinos de Champagne.
La serie R es el Reflejo de la cosecha de un solo año. La cuvée R.015 es fruto, en su mayoría, del millésime 2015 (39 % chardonnay, 61 % pinot noir).
Este champagne es perfectamente acorde con arte del buen beber y buen comer.
DATOS TÉCNICOS
Vendimia principal : Del 6 al 16 de septiembre de 2015
Varietales : 39% Chardonnay y 61% pinot noir
Terruños principales : Avize, Cramant, Oger, Aÿ, Verzenay, Bouzy, Ambonnay.
Vinificación : Fermentación alcohólica con levaduras LALLIER. Fermentación maloláctica parcial
Assemblage : 80% vinos del año 2015. 20% de vinos de reserva (2008, 2009, 2012)
Degüelle : 6 meses antes de su expedición.
Dosificación : 7 g/L.
De capa color dorado.
En nariz aromas a melocotón de viña, a pera madura y avellanas.
En boca amplio y solar. Equilibrio perfecto, con una suculenta tensión mineral en su final
R.015 es el Reflejo de una añada sana y solar. Esta cuvée es la aliada perfecta de un aperitivo entre amigos, en un afterwork y en una comida para buenos paladares. A nosotros nos gusta el maridaje con caracoles, con cordero lechal y cochinillo asado. En postres con tartas de frutas variadas y como no de melocotón.
Todo sobre la cosecha 2015
R.015 es el Resultado de un año solar único! El desarrollo vegetativo se mostró en calma salvo alguna sorpresa. Un invierno clásico sin heladas, sin tensiones parasitarias salvo el oidio que será controlado!
Pero desde mediados de mayo, se instala un clima muy cálido y seco que se mantendrá hasta mediados de agosto, 3 meses seguidos… Este acontecer es excepcional (como en 2003, 1976 et 1951), con unas diferencias térmicas diarias importantes (noches frías y mediosdías muy cálidos).
La germinación fue a mediados de abril y la floración a mediados de junio.
Pero la gran sequía que hubo hizo temer lo peor al inicio del envero (7 de agosto). El gran déficit hídrico recuerda los años 1998, 1976, 1964, 1962 y 1959 ; las uvas mostraban síntomas de sequedad !
Finalmente, de forma inesperada, las lluvias cayeron en los viñedos durante 2 semanas en torno al 15 de agosto. Los granos de uvas aumentaron su tamaño por fin y la bajada de temperatura evitó el desarrollo de la Botrytis cinerea. Todo volvió a su orden y tranquilidad.
Iniciamos la vendimia en la segunda semana de septiembre en un perfecto estado sanitario.
Una añada con todos los superlativos posibles… digna de un gran millésime, con un augurio de calidad excepcional….